Quercus ilex

Todos los días tenemos objetivos que alcanzar tratando de llegar a la meta de la mejor manera posible buscando viejas y nuevas experiencias que puedan enseñarnos y guiarnos sin errores en esta ruta.

Esta es una breve historia donde la técnica, el cultivo y la pasión hacen de este Quercus ilex un Bonsái preparado para un camino de maduración hecho de metas a alcanzar con el tiempo, sin prisas y con mucho respeto.

Quercus ilex

Foto 1.

Esta historia comenzó aún antes con el amigo Patrizio Fermani que, partiendo de un simple árbol recolectado en la naturaleza, lo llevó con años de cultivo y labores a un nivel muy prometedor para hacer de este árbol un Bonsái valioso en el futuro. En el 2004 este árbol entró en mi colección así, continuando un trabajo ya bien iniciado, me dedico particularmente a su maduración y su estructuración. Un trabajo que nunca termina, pero que en los últimos 4 años ha dado su rendimiento llevando a este Quercus ilex a un nuevo nivel avanzado de cultivo y de las técnicas aplicadas.

Quercus ilex bonsái

Foto 2.

Durante todo el 2005 necesité fortalecer la planta para reestructurar los ramales secundarios y terciarios con el alambrado y con una poda de formación lo suficientemente agresiva, a partir de la cual poder retomar correctamente. Un buen abono “desequilibrado” y una poda dirigida del Bonsái, para mantener la forma y hacer retroceder la vegetación, me han ayudado en este intento. El abono “desequilibrado” es solo un abono que se basa en las épocas y las necesidades de la planta, dando así en primavera un mayor aporte de nitrógeno (n) y menos de fósforo (p) y potasio (k). En la fase de maduración de la nueva vegetación, antes del verano, necesitaremos más fósforo y potasio para ayudar a la fase de lignificación.

El ciclo se repite después del período más cálido del verano cuando la planta vuelve a moverse dando más nitrógeno para la reanudación y concluyendo con un abono otoñal con más fósforo y potasio preparando así la planta para un rápido lignificado, para el período invernal y para un buena reanudación en la primavera sucesiva. Todo esto no tiene períodos fijos en el calendario que pueden variar bastante de varios climas de naciones o regiones, es importante aprender a observar el árbol, tratando de entender sus ciclos y sus necesidades.

Foto 1

Foto 2

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Foto 3-4-5.

En febrero de 2006 la planta entró en mi laboratorio para la fase de reestructuración de la ramificación. El objetivo es el de dar con el alambrado un curso y una correcta disposición de las ramas secundarias para así poder construir la ramificación sucesiva sólo con la poda, que es la más ideal para hacer un árbol de hoja ancha mucho más natural.

Quercus ilex

Quercus ilex

Foto 6-7.

En esta fase de cableado, además de arreglar las ramas, es útil también una poda “agresiva” de la parte del ápice de los vástagos dejando solo un par de hojas. Me permitirá tener una nueva vegetación más trasera, que podré trabajar y seleccionar en el futuro. Cortar también todas las ramas dobles, ramas que crecen hacia abajo, ramas cruzadas, todo esto permitirá primero tener más luz dentro del follaje para el crecimiento de nuevas gemas, y en segundo lugar un buen ritmo de ramificación haciéndolo claro, fluido y hermoso. para ver.

Quercus ilex

Foto 8.

Terminado el alambrado observo el nuevo diseño que se le dio a la planta, diseño que será controlado en los próximos años solo con podas. El alambre se irá retirando paulatinamente en el tiempo, dejándolo morder lo suficiente todas las ramas para que la marca desaparezca en breve y al mismo tiempo consiga mantener la posición dada. De esta forma, poniendo atención y controlando periódicamente qué alambre quitar, me permitirá no aplicar más alambre alrededor de las ramas, sino, en casos extremos, solo usar tiros para mantenerlas en una buena posición eliminándolas con el tiempo.

Quercus bonsái

Foto 9.

En primavera estimulo la planta a una buena reanudación después del trabajo, cómplice también del cultivo-preparación adaptado del año anterior que ahora da frutos haciendo que la planta supere rápidamente sin daños y con fuerza el estrés sufrido. En este período la planta, considerando su vigor, participó en la exposición “Decenio UBI 2006”, donde ha sido premiada como “Importante Bonsái Italiano”. Luego prolongo el proceso de renovación hasta fines del 2006 y 2007. Luego poco a poco elimino todo el cableado, periódicamente se realizan las podas para crear una buena ramificación terminal. En esta fase las podas se ejecutan de forma que se creen hojas más pequeñas y entrenudos más cortos.

El criterio que aplico es el de podar cuando el nuevo cogollo está en fase de lignificación y no cuando aún está fresco, dejando sólo un par de hojas. De esta forma las hojas restantes no se espesan, estimulando, para compensar el volumen del follaje, también otras gemas dormidas traseras. Puedes notar cómo un nuevo retoño ya maduro comienza con hojas y entrenudos más pequeños, luego crece con hojas más largas y más grandes hacia el ápice del brote. Si hubiéramos hecho esta poda antes, cuando el cogollo aún está fresco, tendría un alargamiento del entrenudo y un engrosamiento de las hojas restantes porque el cogollo sigue creciendo y habrá que compensar el volumen que hemos cortado.

También se deben cambiar ligeramente los abonos para mantener en vigor la planta controlando su vigor, por lo que la planta deberá hacer el primer crecimiento primaveral con las fuerzas acumuladas en el año anterior y con los escollos almacenados en los últimos abonos otoñales.

Quercus ilex

Foto 10.

En la primavera de 2008 la planta recupera la técnica y el cultivo aplicado en este período. Ahora puedo practicar una defoliación total, que no es recomendable para un siempre verde si no está al máximo de su vigor, y no es recomendable aplicarlo repetidamente en los años.
El alcance es el equilibrio del follaje en su vigor desde las ramas bajas hasta las del ápice. Una vez despojada del follaje, podemos corregir la nueva vegetación, creada en estos años, con la poda.

Quercus ilex

Quercus ilex

Foto 11-12.

Cuando la nueva vegetación está madura, procedo a defoliar los 2/3 de la planta dejando solo la parte apical integral. Mientras tanto acorto la nueva vegetación y arreglo con la poda la ramificación final de esta parte sin hojas. Con esta esencia es difícil eliminar las hojas arrancándolas y puede resultar perjudicial corriendo el riesgo de perder las gemas dormidas al principio de la hoja, por lo que debemos actuar cortando cada hoja a la mitad del pecíolo. En esta fase, antes de que la planta haga nuevas hojas, hay que prestar mucha atención al riego, la planta va ralentizando sus ritmos y procesos, teniendo así una absorción menos radical. Demasiada agua y un compost siempre húmedo, pueden provocar riesgos de pudrición de raíces que pueden comprometer la planta.

Quercus ilex

Foto 13.

Pasados ​​aproximadamente 15-20 días procedí a la defoliación de la parte apical teniendo así la posibilidad de ver un siempreverde pelado y disfrutar así de esta nueva ramificación creada.

Ramas del bonsái

Foto 14.

Las yemas no tardan en abrirse, y entonces las nuevas hojas aparecen primero en la parte inferior de la planta donde primero habíamos eliminado las hojas teniendo así más vigor respecto al ápice. En esta fase se eliminan los nuevos brotes superfluos, que son los que crecen de forma incorrecta, o los que no sirven para crear una buena ramificación.

Quercus ilex

Foto 15.

Después de un mes de la defoliación total la planta muestra el nuevo follaje. Ahora habrá que esperar a que la planta se reanude de este enésimo trabajo dejándola crecer tranquilamente, interviniendo sólo al final de la temporada con una ligera poda de mantenimiento.

Quercus bonsái

Foto 16.

Un trabajo de reestructuración que duró 4 años y aún no ha concluido, lo que nos permite entender y juzgar nuestro método de técnicas aplicadas y de cultivo, buscando siempre lo mejor para cada necesidad de la planta en cada ocasión y situación. Esto es parte de nuestras propias experiencias de años que nos permiten corregir nuestros propios errores y probar nuevos métodos. Largo es aún el camino para la madurez de este Bonsái, los próximos pasos serán a nivel radical y aún a nivel de ramificación creando espacios vacíos en un contexto aún demasiado lleno en mi opinión. Pero esta será otra historia aún toda por vivir y por escribir. ¡Disfruta de tu Bonsái!

Escrito por: Stefano Frisoni

«Graduado en Agricultura, Stefano desarrolló un gran sentido del estilo para el Bonsái, especialmente en los árboles Yamadori. Algunas de sus obras fueron presentadas en UBI, Premio Ginkgo Bonsai, Copa Crespi, Premio Internacional Certre, etc.». Por favor vea su perfil de artista Bonsai; Stefano Frisoni.

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